Paginas.

24 feb 2013

Quilpué


En Quilpué creé un poema bajo la sombra de un árbol, tanteando el suelo dicho, los pájaros cantaron mientras el sol fuerte pegaba, y la iglesia blanca cantó mientras mi alma se sentaba en la ciudad, la tierra desenvainó su espíritu para saciar la memoria, y terminar casi siempre, al menos, queriendo volver una vez más

La plaza me hizo recordar su sombra sonriente, para que los días se hicieran flores y terminase caminando dormido en Santiago, las mariposas se posaron sobre pétalos secos, abandonado creé otro poema, ya ahora en las nubes viendo todo pasar, su sonrisa aun lejos desbordó gotas moradas sobre la serenidad, y las grises calles polvorientas se agudizaron por la música, pero los transeúntes no se inmutan por frases contadas

Siempre armando historias en la ciudad me abandono, y me siento para cantar siempre otra vez, entre huanhuali y plaza vieja buscaré para mis adentros muchos rostros, y sintiendo el calor buscaré alguna vereda solidaria para dormir, sin complicaciones me levantaré adormilado y creyendo cualquier cosa para volver a escribir


-Joaquín Madariaga

No hay comentarios:

Publicar un comentario