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29 nov 2012

El Premio Nobel


El Premio Nóbel de Lectura
me lo debieran dar a mí
que soy el lector ideal
y leo todo lo que pillo:

leo los nombres de las calles
y los letreros luminosos
y las murallas de los baños
y las nuevas listas de precios

y las noticias policiales
y los pronósticos del Derby

y las patentes de los autos

para un sujeto como yo
la palabra es algo sagrado

señores miembros del jurado
qué ganaría con mentirles
soy un lector empedernido
me leo todo - no me salto
ni los avisos económicos

claro que ahora leo poco
no dispongo de mucho tiempo
pero caramba que he leído

por eso pido que me den
el Premio Nóbel de Lectura
a la brevedad imposible


-Nicanor Parra

28 nov 2012

Noche tras Noche

Rostros sin nombre estocando el silencio, manto descubierto de tristes poemas escondidos, 
sueños hechos de magias de fuego, de nuestros sueños silenciados, el mundo cubre negras
nubes que llueven ceniza de pasión muerta, en cualquier noche con tu piel de deseo en la
inmortalidad

Como un eje de necesidad encontramos el amor torcido en un destello desmerecido, junto al
color de tus opacos ojos tu alma descubierta reina en mi andar, nos estamos yendo en
huracanes de tu fruto, nos vamos cada noche en el miedo atronador de la muerte, y juntos
construiremos la vasta de una herida mortal, como un oleo de explosiones que ha sido tomado
para ti

Asolando la jabalina de soledad ésta arquea las puertas de roble en un secreto
enigmático, hasta asquearnos de nuestras sombras, hasta el trecho y maldito reflejo de tu
extraño cadáver


-Joaquín Madariaga

26 nov 2012

El Cordón del Zapato

Una mujer, una rueda
ponchada, una
enfermedad, un deseo; temores ante ti,
temores que puedes estudiar
como las piezas de un
tablero de ajedrez...
no son las cosas importantes las que
llevan a un hombre al
manicomio. Estate preparado para la muerte o para
el asesinato, el incesto, el robo, el incendio,
la inundación.
No, es la serie continua de pequeñas tragedias
lo que lleva a un hombre al
manicomio...
no es la muerte de su amor
sino el cordón de su zapato que se rompe cuando tiene prisa.

El horror de la vida.
es ese enjambre de trivialidades
lo que puede matar más deprisa que el cáncer
y siempre están ahí:
la matrícula del automóvil o los impuestos
o la licencia para conducir vencida
o los contratos o los despidos,
hacerlo tú o que te lo hagan, o
el estreñimiento
o las multas por exceso de velocidad,
polillas o grillos o ratitas o termitas o
cucarachas o moscas y
la tela metálica que se
ha roto,
o pasarse
o no llegar,
o el lavamanos tapado o la casera borracha,
al presidente no le importa y el gobernador
está loco.
El interruptor de la luz roto, o el colchón como
un puerco espín,
105 dólares por la puesta a punto, el carburador y la bomba de
gasolina en Sears Roebuck,
y el recibo del teléfono que sube y la Bolsa
que baja
y la cadena del baño que se ha
roto
y la instalación de la luz que se ha quemado,
la luz de la entrada, la luz del frente, la luz de atrás,
la luz del interior; está más
oscuro que el infierno y
es el doble de caro.
y además siempre hay ladillas y uñas que se encarnan
y gente que insiste que son
amigos tuyos;
siempre hay eso y cosas peores:
grifos que gotean, Cristo y la Navidad,
el salami azul, 9 días de lluvia,
50 centavos de aguacates
y embutido de hígado
morado.

O meterse
de camarera en Norm's con turno doble,
o de vaciador de
orinales,
o de lavacoches o de pinche de cocina
o de ladrón de bolsos de ancianas
que las deja gritando en la acera
con un brazo roto a la edad de
80 años.

De pronto 2 luces rojas en tu espejo retrovisor
y sangre en
la ropa interior;
dolor de muelas y 979 dólares por un puente
o 300 dólares por una muela
de oro,
y China y Rusia y Estados Unidos y
pelo largo y pelo corto y nada de
pelo y barba y sin rostro,
y muchos papeles de liar pero ninguna
hierba excepto tal vez la del jardín.

Con cada cordón de zapato que se rompe
de entre cien cordones de zapato que se rompen,
un hombre o una mujer o una
cosa
va a parar al
manicomio.

Así que ten cuidado
al agacharte.

Charles Bukowski.

20 nov 2012

Tu mirada

Me miraste a los ojos, penetrando,
en lo más profundo de mi alma.
El cristal azul de tus pupilas,
me mostraba, mi imagen reflejada.

Me miraste y pediste temblorosa
que un te amo, saliera de mis labios,
pero ellos ya no tienen más palabras
pues los golpes de la vida los han cerrado.

Me miraste y tu pelo se erizaba,
y una gota redonda en tu pupila
que brotó, de un corazón roto
y cayó recorriendo tu mejilla.

Me miraste y tu rostro empapado
me exigía una palabra, una respuesta,
y mentí diciéndote te amo
por ganar de tu cara una sonrisa.


-Walt Whitman

18 nov 2012

Camello declarado indeseable

Aceptan todas las solicitudes de paso de frontera, pero Guk, camello, inesperadamente declarado indeseable. Acude Guk a la central de policía donde le dicen nada que hacer, vuélvete a tu oasis, declarado indeseable inútil tramitar solicitud. Tristeza de Guk, retorno a las tierras de infancia. Y los camellos de familia, y los amigos, rodeándolo y qué te pasa, y no es posible, por qué precisamente tú. Entonces una delegación al Ministerio de Tránsito a apelar por Guk, con escándalo de funcionarios de carrera: esto no se ha visto jamás, ustedes se vuelven inmediatamente al oasis, se hará un sumario.
Guk en el oasis come pasto un día, pasto otro día. Todos los camellos han pasado la frontera, Guk sigue esperando. Así se van el verano, el otoño. Luego Guk de vuelta a la ciudad, parado en una plaza vacía. Muy fotografiado por turistas, contestando reportajes. Vago prestigio de Guk en la plaza. Aprovechando busca salir, en la puerta todo cambia: declarado indeseable. Guk baja la cabeza, busca los ralos pastitos de la plaza. Un día lo llaman por el altavoz y entra feliz en la central. Allí es declarado indeseable. Guk vuelve al oasis y se acuesta. Come un poco de pasto, y después apoya el hocico en la arena. Va cerrando los ojos mientras se pone el sol. De su nariz brota una burbuja que dura un segundo más que él.

-Julio Cortázar

16 nov 2012

No todos los pies dejan huellas


Esta es la historia de la dama de plomo,
La mujer que martillazos en su rostro recibió,
Como un árbol talado por los leñadores ,
Sin conciencia , frenéticamente ,
hasta cortar hasta el último centímetro del tronco,
El pilar , el núcleo, su corazón.
El hombre que tanto amaba , que tres hijos le concedió ,
Que esquivaba la mirada de ira de un pájaro carroñero,
Que de lo único que se alimentaba era de los restos de amor,
Que le sobraban, que se esfumaban , que se iban como las cenizas se fugan de las fogatas apagadas.
Años de desolación, de penuria, de miseria, de pobreza, de lucha, de conciencia, de fuerza
Que llegan ala intersección entre la vida y la muerte, que fluctúan en un punto en donde
Lo único que importa es ser mujer. ¿ o una marioneta?
Dejó una vida atrás , emprendió el viaje por otros horizontes, encontró el amor
Rompió obstáculos, sacó fuerza hasta de los huesos mas diminutos de su ser, se mostró distinta, interiorizó y complació ala vida: venció los problemas ¡¡¡.
Hoy camina sobre arenas del tiempo , en donde cada paso quema y crea una carretera hecha de cristal, el cristal más caro , no por calidad , sino por ser el fruto de la expresión y el regalo después del esfuerzo.
Hoy camina por las arenas de las playas , en donde cada raya de su frágil pie, queda marcado a la perfección , como un espejo , que refleja , el pie que sujeta al líder del trono mas grande : La humildad.
Hoy camina junto a mí , tomada de mi mano , colocando cada huella de su vida en la mía , mostrando que cada hombre es capaz de crear su propio destino y ser diferente a los demás.
Hoy me enseña que cada traspié es una huella que se debe guardar en la caja de experiencias.
Hoy me educa , no como madre, sino como el sabio que aprendió a volar sin alas.

-Un joven anónimo 

14 nov 2012

Poema para Rocío Millar


Caminando entre los bosques cruzados
No hagas caso de aquel hombre tan frio como un tempano
Mira a tu lado, mira un perro, mírate a ti
Cruzar los umbrales con la serenidad más pura
Jamás vista. Y espera luego de que tu apariencia
Se transforme a la de mil soles

Ten presente que las noches de hojas secas
Son la manifestación de un día perdido
Que al igual que un árbol se lamente
De haber perdido, a él mismo en la impotencia
Y a sus hojas en la corriente
Sigue adelante
Que al igual que un árbol
Las hojas mueren, queda desnudo
Y luego, la primavera,
Y nos abrimos paso entre las sombras de recuerdos
Agónicos por salir a la luz
Pero nosotros les cerramos la puerta
Y arrojamos la llave a las cloacas

Corazón apasionado,
No será cosa que alguien quiera entrar a tu vida
Y no se haya limpiado bien los zapatos

-Pablo José Luis

13 nov 2012

Genio y Figura

Yo soy como el fracaso total del mundo, ¡oh, Pueblos!
El canto frente a frente al mismo Satanás,
dialoga con la ciencia tremenda de los muertos,
y mi dolor chorrea de sangre la ciudad.
Aún mis días son restos de enormes muebles viejos,
anoche «Dios» llevaba entre mundos que van
así, mi niña, solos, y tú dices: «te quiero»
cuando hablas con «tu» Pablo, sin oírle jamás.
El hombre y la mujer tienen olor a tumba,
El cuerpo se me cae sobre la tierra bruta
Lo mismo que el ataúd rojo del infeliz.
Enemigo total, aúllo por los barrios,
un espanto más bárbaro, más bárbaro, más bárbaro
que el hipo de cien perros botados a morir.


-Pablo de Rokha

11 nov 2012

Poema 15


Me gustas cuando callas porque estás como ausente,
y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca.
Parece que los ojos se te hubieran volado
y parece que un beso te cerrara la boca.
Como todas las cosas están llenas de mi alma
emerges de las cosas, llena del alma mía.
Mariposa de sueño, te pareces a mi alma,
y te pareces a la palabra melancolía;
Me gustas cuando callas y estás como distante.
Y estás como quejándote, mariposa en arrullo.
Y me oyes desde lejos, y mi voz no te alcanza:
déjame que me calle con el silencio tuyo.
Déjame que te hable también con tu silencio
claro como una lámpara, simple como un anillo.
Eres como la noche, callada y constelada.
Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo.
Me gustas cuando callas porque estás como ausente.
Distante y dolorosa como si hubieras muerto.
Una palabra entonces, una sonrisa bastan.
Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto.

-Pablo Neruda

10 nov 2012

El perro y el frasco


-Lindo perro mío, buen perro, chucho querido, acércate y ven a respirar un excelente perfume, comprado en la mejor perfumería de la ciudad.

Y el perro, meneando la cola, signo, según creo, que en esos mezquinos seres corresponde a la risa y a la sonrisa, se acerca y pone curioso la húmeda nariz en el frasco destapado; luego, echándose atrás con súbito temor, me ladra, como si me reconviniera.

-¡Ah miserable can! Si te hubiera ofrecido un montón de excrementos los hubieras husmeado con delicia, devorándolos tal vez. Así tú, indigno compañero de mi triste vida, te pareces al público, a quien nunca se ha de ofrecer perfumes delicados que le exasperen, sino basura cuidadosamente elegida.


-
Charles Baudelaire

8 nov 2012

En las trincheras no hay ángeles


Someone’s boring me. I think it’s me.”
-Dylan Thomas


En una noche de espantapájaros
Se rompió el espejo de la luna
En una lluvia cosmonáutica de reflejos inútiles
Se fundieron dentro del temblor oceánico
Liberando ahí, donde las luces 
y las emociones procrean la muerte de infinitos amores,
 Amores testigos de una crueldad omnipresente del siglo XXI

Yo no sé, viejo,
Es tan difícil
Tan difícil ser un mismo
De madrugada salgo, miro
A la gente no le importa
Los miro, les hablo,
Pero no me escuchan
Es esa gente que no se esconde
Que no tiene miedo de la noche

Sólo quiero caminar libre
Por una ancha carretera
Y que algún borracho
O bohemio peatón 
Me lance un hueso
Para que juegue un rato

Te ha llegado, entrégate
A la corrida por la ancha carretera
A los desplantes nocturnos
Desgarradores aullidos
En el ecuador de la madrugada

He visto bajar y bajar
Por peldaño a peldaño
Visto bajar al sol
Un sol escatológico
Y grotesco que asesina
Los sueños de los ciegos

Luego, la tranquilidad
Mortífera
Abrupta
Delirante
Una tranquilidad que nunca
Nadie llamó
Esta tranquilidad se llama muerte
Y se abalanza sobre nosotros con su justicia
A la manera de una cuervo
Sobre el busto de algún portal

Los escondites mundanos
De esos balcones del centro
Donde nadie se asoma
Donde nadie baila, nadie canta

La muerte se pasea bajo capas
De borrachos, mendigos
Desheredados
De odio pasado eterno se aferra a la médula existencial, 
delata la mediocridad, cruda, 
podrida de los mismo que proclaman
Paz

Yo sólo contemplo como se agranda la angustia,
 los amores, la inercia, la indiferencia, las catarsis
Todo en las manos escépticas
Juveniles.

Insisto que yo sólo quiero un hueso
Me quiero ir por la ancha carretera
Y esta noche es tan larga
Que hasta los ladridos hacen eco
En la eterna espera de la mañana

La gente se ha ido y yo duermo
Como una sombra en la nada.

-Pablo José Luis

7 nov 2012

A Roque Dalton

Soy un poco poeta del chambergo flotante,
de los quevedos flotantes, de la melena y la capa española;
un viejo actor de provincia bajo una tempestad artificial
entre los truenos y relámpagos que chapucea el utilero.
Si mal no recuerdo, monólogo, me esmero
en llenar el vacío en que moldeo mi voz,
y la palabra brilla por su ausencia
y el drame me es impenetrable.
Envejezco al margen de mi tiempo
en el recuerdo de unos juegos florales
porque no puedo comprender exactamente la historia.


-Enrique Lihn

4 nov 2012

Plaza Pública

Un hombre sin rostro se sienta en una banca de la una plaza pública. 
La plaza pública posee arboles petrificados y piedras de colores brillantes. Los colores brillantes de las piedras se ven apocados por la atmósfera que emanan los perros echados en el pasto. El pasto está seco y se ve morir por cada pisada de los humanos.
 Los humanos pasean por la plaza pública mirando de reojo al hombre sin rostro sentado en la banca. 
La banca está gastada por el peso de los amoríos de escolares del ayer.
Los escolares con amoríos ahora se encuentran buscando amores en oficinas y prostíbulos. Los prostíbulos atienden a los malaventurados resignados de buscar amoríos en plazas públicas. La plaza pública acoge a un hombre sin rostro sentado en una banca. Abajo  de la banca se alza una mujer muerta con un espejo en las manos. 
En el espejo hay un par de ojos luminosos. 
En los ojos luminosos está el reflejo del rostro del hombre sentado en la banca.

-Pablo José Luis

2 nov 2012

Fuego Negro

Adentro de un arco de llanto, que ningún ser humano ya jamás mirará, yo, borracho, acuchillado, con la lengua quemada por el ancestro del mundo, y el grito inútil, como adentro del pellejo universal, te seguiré llamando: viejo, ruinoso, muerto, sin cabeza, sin corazón, sin pupilas, hundido en lo infinito del infinito, y en el hoyo tremendamente hondo de lo irreparabilísimo, que rodea la gran soledad catastrófica con que me va a saludar tu actitud deshecha cuando me acueste, cansado de estar cansado de cansancio, a todo lo largo y lo ancho de tus riberas irremediables, despedazado en la memoria de los siglos, contigo y los hijos y las hijas y los nietos y las nietas y los padres y las madres, y los padres de los padres y las madres de las madres y los padres de los padres de los padres, y las madres de las madres de las madres, te seguiré llamando; caídos los vestiglos y desaparecido, hundido y perdido definitivamente en las tinieblas de la materia que únicamente, álgidamente, hórridamente alumbra cuando engendra, como un eco, un individuo, en aquel instante inmemoriable en que no he de ser ni una sombra de una sombra, te seguiré llamando, y te seguiré llamando por los siglos de los siglos de los siglos, desde la eternidad vacía, hacia la eternidad vacía, te seguiré llamando... aprendí a escribir adorándote, cantándote, idolatrándote, y hoy lanzo pedazos del mundo hecho pedazos, a tu memoria, tronchado y desde abajo, por adentro de un montón de escombros, entre la sociedad que se derrumba, agonizando, y los pequeños chacales hambrientos, que aúllan en el gran crepúsculo, en el cual todo está roto y no tiene sentido, todo está roto, todo está roto, y por cuyo abismo se levantan las hachas y las horcas, entre las llamas amargas, desaforadas de las últimas catástrofes, con un gran cinturón de terremotos y de cataclismos; ahora la aurora no volverá a asomar más, y los mundos oscuros, entrechocándose, rodarán, conmigo adentro, a la soledad enfurecida.
Degüello mi lenguaje a tus pies y me arrojo como un toro oscuro y desnudo contra la nada.
Acumulando los sepulcros de los héroes y los mártires de la tierra, desde la gran Asia mosaica al África ajusticiada por millones de degolladores de "Dios", desde la Europa de Marx a la América popular a la cual ahogó en alcohol la aristocracia-mercantil-enco-mendera, y a la gran Oceanía cósmica, pantano del pasado, a la orilla mundial de la tumba única de la Plaza Roja y en donde repose el esqueleto de Jesucristo, encima de los océanos y los desiertos de acero, a la sombra de pólvora de los volcanes de Chile, que son el temperamento de la ciudadanía, por debajo de los osarios, por adentro de los milenios y las verdades de oleaje internacional, tu epitafio de universo caído en los siglos, gritará: Aquí duerme y crece para siempre la más hermosa flor de los jardines del mundo: WINETT DE ROKHA.


-Pablo de Rokha